Hoy ha sido un día de esos que no se olvidan: más lúdico y con una temperatura y una luz... impresionantes. Y rápidamente van a comprobar por qué.
Nos hemos ido al sur de la isla. Allí, en Puerto Rico, zona turística al sur de Gran Canaria, en la Escuela de Vela Joaquín Blanco, los alumnos -y alguna profesora- han gozado y disfrutado de su "bautismo de mar". Primero hicieron una pequeña práctica del manejo del remo en tierra firme. No crean que es tontería, no es tan fácil como parece. Y después... ¡al agua, patos! Primera práctica en Kayak o cayac (parece que de las dos formas puede escribirse). Algún que otro lio a la hora de girar, pero al final todos han conseguido dominar la embarcación y salir por la bocana de Puerto Rico. Los menos valientes hemos seguido la travesia con la máquina de fotos.
A la vuelta, práctica de windsurf. Algún chapuzón que otro, que no es sencillo mantenerse en pie nada más comenzar, pero algúnos lo han conseguido. La verdad, ¡lo han pasado en grande!
Luego una paella preparada por la Escuela de Vela, un rato en la playa y de vuelta a Las Palmas de Gran Canaria parada en Maspalomas.
Las dunas, un buen sol, la luz que iba marcando las formas... ¡genial! Allí también han disfrutado "a tope". Sirva la imagen de muestra. ¿Saben como se reboza una croqueta, verdad? Pues así terminaron algunos, con arena de las dunas por todas partes. Pero era una gozada verles disfrutar. Nos hicimos fotos y hasta practicamos nuestro inglés con un turista que nos hizo unas fotos geniales a todos juntos. Cuando las mande por e-mail desde Alemania -me dijo en la semana que viene- ya la podré aquí y se la haré llegar a todos, no se preocupen.
Vuelta a casa. A las siete nos reunimos en el Instituto todos los que hemos participado en el Proyecto: padres, alumnos y profesores para compartir un rato todos juntos. Los padres, y algunos alumnos, prepararon suculentos platos y dulces con los que disfrutamos. Música canaria de fondo, emociones, intercambio de regalos... y lo más importante: compartir todos juntos estos últimos momentos del intercambio. Mañana, a las siete de la mañana sale el avión. Hay que levantarse prontito para llegar y, aunque sea con los ojos pegados por el sueño, darnos el último abrazo hasta que nos volvamos a ver, el próximo abril, en Salas.
Desde aquí quiero agradecer a todos los que de una manera u otra han colaborado con este intercambio: Cabildo Insular de Gran Canaria, Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Base Naval, Yacimiento arqueológico de la Cueva Pintada en Gáldar, la plantación de plataneras, a la Escuela de Vela Joaquín Blanco de Puerto Rico, Amanda Bus, a los padres de Alba, Rubén, Alba, Fran, Ayla, Lucía, Yane, Patricia, Ana, Sara, Raquel, Eliana, Alejandro, Mariángel, Kyung; a ellos mismos que han acogido en sus casas a los alumnos del IES Arzobispo Valdés, al Equipo Directivo y los profesores de nuestro Instituto, y especialmente a Nedy y Miriam, profesoras del IES Arzobispo Valdés; y a Ana, Beatriz, Mirta, Noemí, Paula, Fernando, Iván, Octavio y Rubén, alumnos del IES Arzobispo Valdés. Por el trabajo de todos ellos y su cariño en la tarea educativa que suponen estos intercambios, gracias a todos.
¡Nos vemos en Salas en abril!
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